La chispa de la vida

Iniciado por Krimhild, 12 de Enero de 2012, 06:11:17 PM

Tema anterior - Siguiente tema

0 Miembros y 1 Visitante están viendo este tema.

Krimhild

LA CHISPA DE LA VIDA


Sinopsis

Roberto, un publicista en paro, es rechazado por todas las agencias en las que solicita trabajo. Su situación económica es desesperada. Ya nadie valora que fuera el creador del archiconocido slogan "la chispa de la vida" de Coca-Cola.

Todo cambia cuando de pronto sufre un accidente que le hace debatirse entre la vida y la muerte. Queda atrapado de tal forma que ni el Samur, ni los bomberos, ni siquiera los médicos se ponen de acuerdo en cómo rescatarlo.

Lo absurdo y dramático del suceso provoca el interés de los medios de comunicación. El protagonista decide aprovechar su experiencia como publicista para explotar la situación, convirtiéndola en un espectáculo mediático. Para ello contrata a un representante. La idea es simple: Vender la exclusiva a las televisiones y solucionar para siempre el futuro de su familia.

Luisa, su mujer, llega al lugar del accidente y asiste impotente al espectáculo que se ha generado alrededor de su marido. Intenta convencerle de que desista de su idea, pero la obsesión de Roberto por conseguir la exclusiva es cada vez mayor. Sin embargo, las negociaciones con las televisiones se eternizan, los intereses afloran y el rescate se complica. ¿Conseguirá el protagonista salvar su vida? ¿Preferirá dar la vida a cambio del dinero?.

Crítica

El lado "indignado" de Alex de la Iglesia

Cuando se entra a la sala de cine para ver la última película de un director favorito, se espera que mejore lo anterior o, al menos, que mantenga el mismo nivel. Si no se encuentra lo uno o lo otro suele decepcionar, pero si se ve algo diferente y, aún así, satisfactorio, el concepto de ese director se mantiene o mejora.

"La chispa de la vida" es una película de Alex de la Iglesia. Una simple frase que dice mucho para aquel que conozca al director. Pues bueno. Si vais a ver esta película, olvidaos de todo eso. No os vais a encontrar nada parecido a "Balada triste de trompeta", a "La comunidad" o "El día de la bestia". Esta película es un drama actual en un escenario romano, literalmente.

Roberto (José Mota) es un publicista en paro, que con su maletín y sus currículums debajo del brazo se dedica a buscar trabajo. Él, que fue el creador del slogan de Coca Cola, "La chispa de la vida", harto y aburrido de tener que suplicar por un puesto de empleo, decide darle una sorpresa a su mujer y regalarle para el aniversario una noche en el hotel en el que pasaron la Luna de Miel en Cartagena. Pero ya no es un hotel, si no un museo. Por infortunios del destino acabará postrado en el suelo de las obras, consciente, pero con una barra de metal en la cabeza.

La película que Alex de la Iglesia ha filmado no puede ser más idéntica a la realidad actual por la que pasa España. Un hombre cualquiera en paro que no encuentra trabajo. El drama se siente desde las primeras imágenes de la película. Y para representarlo José Mota, un actor de comedia, hasta ahora. Si creíamos que Mota sólo era capaz de representar los especiales de Nochevieja, estábamos equivocados. Alex ha elegido un variopinto plantel de actores entre los que destaca José Mota, quien se pasa tres cuartos de la película tumbado sobre unas barras de metal y con una de ellas en la cabeza, lo que le imposibilita mirar hacia los lados, ver más allá de lo que tiene enfrente. Una metáfora como muchas otras que aparecen a lo largo de la película y que el espectador sabe de inmediato lo que representan. Conocemos la pérdida de moral y de valores de algunos medios de comunicación o de algunas personas que trabajan en ellos. Sabemos cuál es el revuelo que se forma ante una desgracia y hemos aprendido convivir con gente que le pone precio a su vida e intimidades.


Esa es una de las críticas que Alex de la Iglesia ha querido mostrar en su película. Lo mediático que es todo ahora y cómo las personas se pegan ante la pantalla de televisión para ver desgracias. Pero no sólo José Mota sufre. Le acompaña su mujer (Salma Hayek), una mexicana que daría todo lo que pudiera por que su marido fuera feliz. Juan Luis Galiardo y Blanca Portillo, el alcalde de Cartagena y la directora del museo, respectivamente, dos personajes completamente distintos. Y a partir de aquí, amigos y compañeros del director: Carolina Bang, Santiago Segura, Manuel Tafallé, Antonio de la Torre... El espectador asiduo a las películas de Alex de la Iglesia, busca a los característicos de siempre y cuando uno falta, le extraña.

"La chispa de la vida" es una crítica al estado actual del país. No aporta nada nuevo a la carrera de Alex de la Iglesia, pero sí a la de su actor, José Mota. No es a lo que el director nos tiene acostumbrados, pero tampoco defrauda del todo, más que nada porque aunque le cuesta arrancar, tiene unos diez primeros minutos horrorosos, os recomiendo que aguantéis sentados, porque en cuanto coge carrerilla y ritmo, la cosa mejora.

Alex de la Iglesia ha hecho siempre las películas que ha querido. Con su temática y sus ideas personales. Puede gustar más o menos, pero nadie puede negarle que no sea original. Si no fuera por eso, nadie le conocería y tendría repercusión. "La chispa de la vida" no es original como sus antecesoras, pero seguramente nadie hubiera representando tan bien, aunque sea muy obvio, la oscura y triste realidad actual y encima aderezarla con notas del humor negro de Alex de la Iglesia, aquel que ha heredado de grandes directores como Antonio Mercero o Chicho Ibáñez Serrador.

Nota: 6/10




  •  

jescri

Pues no pinta mal, y el reparto es cuanto menos llamativo   :si

Gracias compi   :guiñar
  •  

Banacafalata

#2
LA CHISPA DE LA VIDA


Sinopsis:

Roberto (José Mota) es un publicista en paro que alcanzó el éxito cuando se le ocurrió el famoso eslogan: "Coca-Cola, la chispa de la vida"; pero de esa época ya no queda nada. Ahora es un tipo desesperado que, intentando recordar los días felices, regresa al hotel donde pasó la luna de miel con su mujer (Salma Hayek). Sin embargo, en lugar de un hotel, lo que encuentra es un museo levantado en torno al teatro romano de la ciudad. Mientras pasea por las ruinas, sufre un accidente: una barra de hierro se le clava en la cabeza y lo deja completamente paralizado. Si intentara moverse se moriría. Se convierte así en el foco de atención de los medios de comunicación, lo que volverá a cambiar su vida...

Crítica:

Telecirco

Hay una cosa que siempre me ha fascinado del cine de Billy Wilder y es lo actuales que son todas sus películas, daba igual que yo las descubriese muchos años después de que él las hiciese, todas seguían siendo rabiosamente actuales. Entre todas ellas quizá una de las que más destacaba en este aspecto era El Gran Carnaval, protagonizada por Kirk Douglas en 1951, en ella Wilder lanzaba una crítica feroz contra los medios de comunicación, contando la historia de un periodista que veía su oportunidad de conseguir un gran éxito al encontrarse con un hombre atrapado sin poder salir de una montaña, allí el periodista sin ningún tipo de escrúpulo era capaz de hacer cualquier cosa para que ese hombre siguiera permaneciendo ahí enterrado a cambio de su gran exclusiva. Álex de la Iglesia retoma esta historia 60 años después, no para actualizarla, pues esto habría sido algo insensato e innecesario, si no para darle un paso más y cargar sus iras no sólo contra la prensa, sino también para crear una sátira social sobre la sociedad actual, dónde el ser humano es capaz de ser su propia víctima y de llevar hasta el extremo su propio sufrimiento a cambio de un cheque y de sus cinco minutos de fama, al contrario que Wilder, la película de De la Iglesia dentro de muchos será vieja pero hoy la aprovecha para enfrascarla en la crisis actual y denunciar con mucho menos tino del que lo hiciera por ejemplo Max Lemcke en la reciente Cinco Metros Cuadrados.

El problema principal con el que se encuentra Álex de la Iglesia es el de trabajar con un guión que no es propio, es Randy Feldman, guionista de películas como Tango y Cash y El Negociador, quien lo firma, y además de que el libreto es realmente flojo e incluso bastante ridículo, el realizador se ve incapaz de llevar a su propio terreno. Tras una presentación larguísima y horrorosa que sólo sirve para demostrar la poca química que existe entre sus dos protagonistas, tenemos una recta inicial bastante agradable y sorprendente, una comedia negra que se diluye por completo al producirse el grave impacto que cambiará por completo el devenir del protagonista. Aunque intenta dejar toques de humor por el camino, con unos personajes exagerados y caricaturescos la cinta empieza poco a poco a parecerse en un drama social del que solo sale cuando la exageración continua de sus personajes hace presencia, algo que por otro lado llega a ser un recurso bastante cansado, la exageración llega al límite en ciertos secundarios como los de Juan Luis Galiardo o Fernando Tejero, en este camino en tierra de nadie a De la Iglesia solo le quedan para escudarse la brutal crítica social y el factor emocional, ambos también se sienten fracasar, el primero por sólo ser capaz de cargar contra todo (no solo los medios, también política y bancos entran en el juego) a través de rabiosas diatribas pronunciadas por su protagonista, y en lo segundo por una sobreexplotación de los momentos emocionales que como todo en esta película acaba resultando excesivo.


De la Iglesia tampoco trata ocultar sus intenciones, así podríamos decir que esta película se encuentra unida en un lazo con Balada triste de Trompeta (aunque aquella fuera una película notable y su comparación no hace más que dejar en evidencia a su última película) dentro del mundo circense, pero en aquella el circo estaba presente en forma física, aquí se cambia por un viejo teatro romano, que actúa en la misma manera, pero el realizador bilbaíno no nos deja de recordarnos todo el tiempo su apreciación como circo, algo que se siente completamente innecesario. Al igual pasa con la necesidad de traer a coalición sucesos recientes como el de los mineros chilenos o incluso traernos un final en el que se ven claras reminiscencias del 15M, un cúmulo de tantas referencias que no necesitan explicación, pero que el director bilbaíno se ve medio forzado a explicárnoslas minuciosamente hasta sobresaturarnos. Aunque pese a todos sus errores, y unos excesos que la hacen ser una película lejana y carente de emoción, aún le queda a De la Iglesia suficiente talento como para hacer que el espectador se llegue a interesar por la historia.

La impresión general del cuadro podría ser aún mejor si no nos encontrásemos con un casting tan horroroso encabezado por un José Mota que resulta completamente inverosímil, es cierto que ya de por si no carece de un gran talento interpretativo y es incapaz de ocultar su vis cómica, lo que lo hace totalmente inapropiado para un papel de este tipo, pero el principal problema de su actuación está en que se encuentra completamente descontrolado, hiperexpresivo y como todo aquí, sí, realmente excedido, De la Iglesia no le sabe controlar y su personaje se convierte en un completo disparate. Realmente por grandes actuaciones, empezando por una nefasta Salma Hayek y por un grupo de secundarios y cameístas que parece que se han juntado para hacer una reunión de amiguetes. Pero más allá de todo eso, quizá el mayor problema con el que se topa la película es que De la Iglesia se ve incapaz de trabajar con un guión que no es suyo, en alguien con un estilo tan marcado como el del bilbaíno, la imperiosa necesidad de llevarlo a su terreno acaba siendo un enemigo mortal, el realizador hiperboliza toda la película hasta acabar realizando un film completamente excedido, carente de personalidad y que fracasa en todo lo que se propone, no consiguiendo hacer gracia cuando trata de ser divertida y mucho menos de emocionar e incluso mostrándose incapaz de servir como argumento crítico ya que para poder lanzarlas se tiene que salir por completo del nodo de la película. Estamos ante la que posiblemente sea la peor película de realizador de El Día de la Bestia, una película que la única chispa que realmente tiene es la que aparece en el título.

Nota: 4
  •  

Sullivan

No se de quien fiarme..... Alex es uno de mis dioses, aunque bien es verdad que desde que esta peli salió a la luz no me ha dado muy buena espina...
  •  

Dragondave

Cita de: Banacafalata en 12 de Enero de 2012, 08:51:37 PM
Estamos ante la que posiblemente sea la peor película de realizador de El Día de la Bestia

Totalmente de acuerdo. Y eso que ya en su día (no sé qué pensaría de ella ahora si la revisionase) Acción mutante no me convenció del todo. Álex intenta una crítica social de toda la mierda que nos inunda en estos últimos años (telebasura, bancos explotadores, falta de valores morales, el paro...) pero muchas veces esa crítica se limita a la pura y dura exposición de ella en palabras de los protagonistas en primer plano (véase la secuencia donde maldice a los bancos), no existe un guión interesante detrás del entuerno, sino más bien secuencias para criticar esto y lo otro... Vamos, que todo me resultaba muy ficticeo. No ayudaba que los dos protagonistas no sepan transmitir al espectador (en especial, por raro que parezca, Salma Hayek, totalmente desatinada)

No es que sea un paquete de película, tiene ciertos tramos mejor trabajados, y pese a todo, la historia se sigue con interés, pero a Álex de la Iglesia hay que exigirle más, porque como dice Banaca, esto es un ejercicio que aprovecha la situación actual y en unos años estará desfasado. La sutileza brilla por su ausencia.

Ojalá Las brujas de Zugarramurdi vuelva a traernos al Álex de humor negro que tan buenos ratos me ha hecho pasar.

Un 5,5
  •  

Sullivan

Me ha sorprendido para bien. Una de esas historias que te hacen cagarte en este puto mundo de mierda. Muchas escenas ponen la piel de gallina y hasta emociona, y la labor de Alex se hace notar (ese final con otro director no habría sido así, y los toques de humor negro están bastante geniales).

Además, DIOS tiene un cameo por ahí, y eso ya suma puntos.

Ah y hablando de los actores protagonistas, al principio quizá chirrían un poco (esa primera escena es penosa) pero a medida que avanza se les va cogiendo el tranquillo y la verdad esque me han sorprendido en sus papeles. Muy muy bien.

Un 7
  •  

Banacafalata

Mereces que te retire el saludo cinéfilo
  •  

Sogivemethedrug

Vale, yo tampoco sé de quién fiarme ahora!
Alex de la Iglesia también es uno de mis dioses... pero viendo como son las críticas de la película ya no sé que pensar... Igualmente creo que lo mejor es que saque tiempo, y vaya yo a verla  :palomitas y ya opinaré!
¿Saben una cosa? Si importa el modo en que un hombre se hunde... 
  •  

Sullivan

  •  

shi94

Yo la veré esta semana, con la división de opiniones entre Sullivan y Banaca no sé que pensar, pero bueno... ya opinaré por aquí cuando la vea.
  •  

Sullivan

Cita de: shi94 en 22 de Enero de 2012, 02:42:02 PM
Yo la veré esta semana, con la división de opiniones entre Sullivan y Banaca no sé que pensar, pero bueno... ya opinaré por aquí cuando la vea.

Sabes quién es el que derrocha coherencia :gafas
  •  

Banacafalata

Cita de: Sullivan en 22 de Enero de 2012, 02:43:50 PM
Cita de: shi94 en 22 de Enero de 2012, 02:42:02 PM
Yo la veré esta semana, con la división de opiniones entre Sullivan y Banaca no sé que pensar, pero bueno... ya opinaré por aquí cuando la vea.
Sabes quién es el que derrocha coherencia :gafas

y no eres tú xD

  •  

shi94

Cita de: Banacafalata en 22 de Enero de 2012, 03:01:07 PM
Cita de: Sullivan en 22 de Enero de 2012, 02:43:50 PM
Cita de: shi94 en 22 de Enero de 2012, 02:42:02 PM
Yo la veré esta semana, con la división de opiniones entre Sullivan y Banaca no sé que pensar, pero bueno... ya opinaré por aquí cuando la vea.
Sabes quién es el que derrocha coherencia :gafas

y no eres tú xD



hasta que no la vea yo, la coherencia no va a llegar por esta zona.  :poss
  •  

shi94

Ya la he visto.  :D.
Expongo mi opinión: José Mota y Salma Hayek muy poco creíbles al principio, Mota mejora un poco a lo largo de la peli. No entiendo las nominaciones a los Goya. Lo mejor de la película es el mensaje de conciencia social, lo peor es que no te llega aportar tanto como debería.

Un 6

PD: De Madrid a Cartagena no se tardan 5 minutos.  :poss
  •  

Wanchope

Dado que no levantó mucho entusiasmo en su momento no esperaba gran cosa, pero lo cierto es que me ha parecido bastante decente. Vale que precisamente le falta "esa chispa" que indica en su título, que parece más un impersonal encargo que una película de Alex de la Iglesia y que le falta alma, pero al menos es bastante más constante y sólida que la más interesante pero desconcertante 'Balada triste de trompeta'. Con un poco más de trabajo podría haber sido mucho mejor... pero en manos de otros muchos habría caido de lleno en el despropósito. Ni transmite ni deja de transmitir, aunque abusar de caras conocidas "a lo Torrente" le resta más que le suma.

¿Lo mejor de todo? Que he "cazado" en pantalla y por sorpresa a un amigo que no me había dicho nada de que hubiera estado en el rodaje, el muy jodío. Peazo cameo, al verle en pantalla me he quedado todo loco con la duda, y hasta que me lo ha confirmado vía WhatsApp.  :alegre
  •