Os declaro marido y marido (2007)
They're as straight as can be, but don't tell anyone. SINOPSISChuck y Larry son dos miembros del cuerpo de bomberos de la ciudad de Nueva York y grandes camaradas fuera del trabajo. Mientras Chuck (Adam Sandler) vive una vida llena de mujeres y diversión, Larry (Kevin James) es un padre de familia con dos hijos. Cuando Larry se da cuenta que un día podría dejar desamparados a sus hijos, la única forma en que podrá asegurar su futuro es fingir un matrimonio con su mejor amigo, tomando ventaja de las nuevas leyes de convivencia.
CRITICAAdam Sandler (50 First Dates) es uno de los principales actores cómicos en norte-américa. Su paso ha sido ascendente desde sus días en Saturday Night Live y a últimas fechas, ha tenido el poder económico suficiente para generar proyectos completamente personales, rodeado de gente de su confianza y amigos. En esta ocasión la fórmula se repite con su gran colaborador Dennis Dugan, quién lo dirigirá en su siguiente película "You Don't Mess With the Zohan".
Si existe una palabra que define a la película es desperdicio. Cada 20 minutos la trama abre posibilidades que vale la pena explorar, desde como se concibe por un hombre que destina testosterona el respeto hacia la comunidad que tanto desprecia, hasta la discriminación de la que son objeto cuando su relación ya lleva algunos minutos sobre la pantalla, sin embargo ninguna es aprovechada. Una tras otra las oportunidades y un análisis un poco más serio de la comunidad gay se ven perdidos y esto es muy doloroso pues pocas personas como Sandler tienen un nivel tan grande de convocatoria. Todo ese potencial se ve perdido en una comedia ligera, completamente superficial y con poco que aportar fuera de uno que otro chiste.
A pesar de todo esto, la fórmula es efectiva. Sandler y James tienen gran talento y rodeados de todo tipo de estrellas como Rob Schneider (Deuce Bigalow), Dan Aykroyd (Drivin Miss Daisy), Richard Chamberlain (Shogun), Rachel Dratch (Click), logran hacernos reír con todo tipo de chistes y situaciones que por más gastadas que resulten, con todo este ambiente, es imposible no reírse ante tal farsa.
Es verdaderamente una pena que una película que pudo ser algo extremadamente interesante sea sólo un pretexto para hacer un sketch con casi dos horas de duración, poniendo juntos todos los chistes de homosexuales que Sandler y James se pudieron imaginar. Esto se conjuga con los estereotipos marcados que más le gustan a los personajes, por un lado Sandler repite el papel (ya por demás actuado) de un hombre sexualmente irresistible; y por el otro, de James que es una buena persona a pesar de su apariencia física, ya explorado de sobremanera en la serie King of Queens. Por si fuera poco, la película sirve de igual manera para que Sandler pueda usar a placer la cámara para hacer todo tipo de muecas y actuaciones gays sin reparo y a la menor provocación.
"I Now Pronounce You Chuck And Larry", es una comedia ligera sin pretensiones que nos hará reír, pero que muy rápido olvidaremos.