Por partes:
- Como película:
Es curioso, uno se pone a ver ‘Luna Nueva’ y sabe perfectamente lo que esta película le va a ofrecer. El que espera una obra maestra, sale con esa idea; el que espera un truño, allí lo tiene; y los que como yo esperamos una buena película (sin más), es lo que vemos. Es una película sin grandes aspiraciones, no busca un Oscar, ni tan siquiera una nominación para alguno de sus actores. Su idea es mostrar una historia diferente, contada no sólo para adolescentes (como quieren hacernos ver). Y es diferente porque aquí no hay plagios (o al menos yo no los veo). Es cierto que los personajes están inventados, pero nunca se nos habían mostrado desde la mayor debilidad del ser humano: el amor.
La fuerza de ‘La saga Crepúsculo’ es tal que no importa qué director elijan, la película nunca cambiará en el fondo y en la forma. Sólo requiere un tipo (o como en este caso, tipa) que sienta Crepúsculo y sepa reflejar en el guión lo que la gente espera (para bien, o para mal). Para colmo de los colmos, me gustan los Pattison, Stewart, Lautner y compañía. Vale que sus registros no es que sean demasiado amplios, pero de ahí a lapidarlos... Creo que tenemos actores para rato.
Buenísimo el momento Bella tirando de B.S.O. en la escena en la que pasan los meses (octubre, noviembre, diciembre…).
- Como adaptación:
Buena, sí; mejorable, también. En ese sentido Melissa Rosengerg ha dado en la tecla. A colación viene mi comentario anterior: La guionista ha sabido dar a los lectores lo que buscábamos. Cuando leía ‘Luna Nueva’ (vaya por delante que para mí es un buen libro), pensaba en ocasiones cómo sería una película de este libro, y ayer, cuando la vi en la pantalla, vi punto por punto lo que me imaginé en su día.
Para quien no haya leído la obra, decir que el personaje de Edward en el libro aparece en un segundo plano prácticamente hasta el final. Aquí hay dos horas de historia, y no podían perder el tirón de un personaje tan importante. Esto lo hicieron muy bien, hasta el punto que apenas si se echa en falta.
- Como fenómeno:
“¡Manda carallo!”, que dirían los gallegos. Dicen que esta saga vuelve locas a las niñas, ¿y?, ¿cuál es el problema?, porque yo lo estuve buscando y ahí sigo. Personalmente tendría muchas cosas que agradecer a este fenómeno, como por ejemplo que se centre más en las relaciones entre personas que en la sangre y la violencia; que huya de las grandes estrellas para poner gente que, para el gran público, se podría decir que se han dado a conocer aquí. Igual a muchos les gustaría más con un poquito de acción por aquí y otro poquito de gore por allá, pero es lo que hay.
Dicho esto, hay muchas cosas en esta película que se podrían mejorar, pero bueno, se ha hablado tanto y tan mal de ella que prefiero centrarme sólo en los aspectos que considero positivos.
Nota: 7,5.