« en: 14 de Julio de 2016, 08:27:47 pm »
1492: LA CONQUISTA DEL PARAÍSO (1492: THE CONQUEST OF PARADISE)
SINOPSIS: Cristóbal Colón, un navegante genovés, sueña con encontrar una ruta marítima nueva que permita al reino de Castilla llegar directamente a los mercados de Asia, a fin de prescindir de los intermediarios que encarecían las mercancías. Colón había presentado su proyecto al rey de Portugal, pero los expertos lo rechazaron porque lo juzgaron factible pero ruinoso. También en Castilla fue rechazado al principio. A pesar de todo, finalmente consigue el apoyo del padre Marchena y del armador Martín Alonso Pinzón. Además, el banquero valenciano Luis de Santángel le promete una audiencia con la Reina Isabel de Castilla, que aprueba el proyecto.UNA PELÍCULA REGULAR PARA UN GRAN ACONTECIMIENTO
En 1992, Ridley Scott ya era un director de renombre (venía el año anterior con el éxito de 'Thelma & Louise') y se cumplían 500 años desde el descubrimiento de América. Aprovechando que el Pisuerga pasaba por Valladolid, al realizador británico se le ocurrió hacer el descubrimiento película.
Con el éxito de la cinta de las mujeres rebeldes, el reparto y el regreso de Vangelis a una cinta de Scott tras 'Blade Runner', se podría pensar que podría salir algo muy potable; el paso del tiempo no ha puesto a esta obra entre lo mejor del realizador, yo desde que lo vi tampoco lo pienso.
Y es que su excesiva duración (poco más de dos horas y media) hace mella en un trabajo donde sí están bastante bien la dirección artística, la fotografía y la banda sonora de Vangelis, cuyo estilo épico encaja como un guante en sus colaboraciones con Ridley Scott. Si tuviera que destacar a alguien de los actores, destacaría a Gérard Depardieu solamente.
'1492: la conquista del paraíso' se podría haber contado con menos metraje cortando tramos prescindibles. Con este montaje no se queda mal a pesar de todo; sin embargo su guión necesita mejorar.
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« última modificación: 30 de Enero de 2021, 07:26:46 pm por Michael Myers »

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Quizá en esos últimos días, el amó la vida con más intensidad que nunca, no sólo su vida, la de cualquiera, mi vida.
Y lo único que quería eran las mismas respuestas que el resto de nosotros: ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? ¿Cuánto tiempo me queda?