Aunque la gente de por estos lares considere que soy un poco prejuicioso para según qué géneros cinematográficos, la verdad es que cuando ayer me enteré que por la primera daban
Terminator, me alegré. Qué mejor excusa para verla de una vez por todas: un clásico, no sólo de la ciencia ficción, sinó del cine contemporáneo, una película mítica, que ha dado pie a multitud de homenajes, secuelas, todo tipo de merchandising e incluso series de televisión. Era el momento y la empecé con ganas, riéndome de lo lindo con el cachondo inicio de la película, con un Arnold Schwarzenegger en pelota picada, más fibrado que los cojones de un toro de Osborne y con un culito bien puesto y duro machacado en el gimnasio. Y el inicio me gustaba, llevaba media hora y no estaba nada defraudado con lo que veía (a pesar que el guión es bastante flojo y hay cantidad de escenas que rozan el ridículo por su incoherencia, y no me vale con que la gente me entre con que es una peli de sci-fi y que todo vale). Pero, no sé, a mitad de película da un bajón tremendo, se pierde el interés de forma alarmante y acabas deseando que acabe ya antes de caer rendido ante los brazos de Morfeo. Eso me pasó a mí. Creo que pasada la escena de la discoteca fue. A partir de ahí una lucha mastodóntica para no sucumbir ante el cierre de mis ojos. Lo jodido es que eran las 11 de la noche. Y uno de los principales problemas de esta película es, a mi parecer, que ha envejecido de pena (basta con compararlo con cualquier peli de la saga
Star Wars, que le da sopas con hondas). Que sus efectos especiales vistos hoy día son pasto para ovejas. Ridículos. Bochornosos. Y cuando el guión no acompaña, una película que basa gran parte de su potencial en esos (d)efectos especiales es una película mediocre. Y me sabe mal decirlo, pero es lo que le pasará a
Avatar dentro de 20 años (ya que estamos con Cameron). Que la mirará alguien por primera vez en el 2031 y pensará que es una mierdecilla, que ya no sirve ni el envoltorio. En cuanto a la música, pues bien, acompaña bastante bien el relato. Las actuaciones son correctillas, lo que suele ser típico en una película de estas características.
Ah, y ya lo de que el tito Schwaze borda su papelo como cyborg...

Precisamente porque es un actor pésimo le sale bien la interpretación, simplemente es poner la cara de palo que pone en todas sus películas, ya que sus registros son más bien escasos y mediocres. Pero sí, que en realidad lo clava, sólo que hay que tener en cuenta de quién hablamos.
Un
4 y a correr.