En el día en el que la final de la liga se puede decidir, la atención se la está llevando la cantada destitución del actual seleccionador español de baloncesto, Pepu Hernández. Las razones para el relevo son: 'el incumplimiento por parte de Jose Vicente Hernández de compromisos contractuales'; 'la falta de respeto institucional y personal hacia la FEB y varios de sus miembros directivos que supone haber lanzado públicamente, sin fundamento alguno, acusaciones de 'persecución y maltrato''; y, por último, 'las condiciones de trabajo poco propicias creadas por todo lo anterior a menos de dos meses de la participación de la selección en la competición más importante del calendario deportivo mundial como son los Juegos Olímpicos de Pekín de este próximo mes de agosto en Pekín'.
Tal y como está de revuelto el río, es difícil saber cuál de las partes es más culpable. Los enfrentamientos entre presidente y seleccionador comenzaron en el pasado eurobasket, cuando Pepu se quejó del elevado número de compromisos sociales de los jugadores que dificultaban su concentración durante la preparación. Además, las malas lenguas comentan que el presidente llevaba bastante mal el que Pepu fuera el que se llevara prácticamente todos los elogios tras las brillantes últimas actuaciones de la selección.
Ahora, el tema más peliagudo está en conocer quién será el próximo seleccionador. Supuestamente, la lista de convocados para las Olimpiadas se debería hacer pública 48 horas después del fin de la liga ACB. Ssi gana hoy el TAU, eso significa que debería ser el viernes que viene. Un poco prematuro para el elegido incluso en el caso de que fuera contratado antes de ese día. Los nombres que más están sonando son el de Aíto García Reneses y Sergio Scariolo.