Jo, qué noche (After hours)- (Clásicos modernos) (1985)

Iniciado por replicante, 16 de Abril de 2010, 06:57:42 PM

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replicante

        
                Jo, qué noche!





Sinopsis

          Al finalizar su jornada laboral, un solitario empleado de una compañía de informática (Griffin Dunne) se ve envuelto en una serie de extrañas circunstancias que le llevan a uno de los peores barrios de Nueva York. Allí, vivirá una interminable y alocada noche...


Ficha técnica

Director: Martin Scorsese Intérpretes: Cheech & Chong, Griffin Dunne, Linda Fiorentino, Rosanna Arquette, Teri Garr, Verna Bloom, Cheech Marin, Victor Argo Título en VO: After Hours País: USA Año: 1985. Duración: 97 min. Clasificación: Mayores 13 años Género: Comedia Color o en B/N: Color Guión: Joseph Minion Montaje: Thelma Schoonmaker
Fotografía: Michael Ballhaus
Música: Howard Shore





Acerca de Jo, qué noche!

        Un mejor título en castellano que se le podía haber dado a esta especial película de Martin Scorsese sería: "Jo, que noche he pasado tan mala!" Porque dicho sólo: Jo, qué noche! Pareciera que esa noche a la que se refiere el título, y que malvive el protagonista, ha podido ser divertida y para recordar, por lo bien que se lo  ha podido pasar...y para nada, todo lo contrario. En inglés su título (el original) es After hours y se refiere a los locales de copas o discotecas que abren sus puertas cuando los bares nocturnos comunes cierran las suyas, casi siempre coincidiendo con la última hora de la noche, rozando la madrugada, y en los que se junta lo más variado y extraño de la ciudad que satisface sus más variadas necesidades etílicas, o de drogas y diversión de todo tipo. De muchos de estos especimenes nocturnos, de los lugares de la gran ciudad donde sólo almas con ganas de la evasión más visceral que  quiere perderse y olvidarse de lo de siempre, producto del hastío más pegajoso y molesto (en esto pensaría en el protagonista Paul Hackett, protagonizado por el actor Griffin Dunne)  habla Jo, qué noche!, pero de una forma diferente a la habitual, bastante simbólica y sugerente. En este marco es donde se desenvuelve la acción que es un sueño en sí mismo y que pasa de lo divertido a lo angustioso en un proceso donde se juzga y se quiere castigar sin justificación alguna a un protagonista Griffin Dunne incapaz de poder escapar de unos acontecimientos que en cualquier momento lo arrollarán.





       Digo que la película es una pesadilla en sí misma no solamente por la sensación que se palpa (con elementos tales como lo surreal, pero aquí comedido, el querer escapar de una amenaza de la que no se logra desprender Paul Hackett, la sensación de soledad y desamparo en un contexto hostil, pero disfrazado de comprensión y amabilidad, etc) sino por una interpretación que se podría hacer consecuencia de un análisis y la "descodificación" siguiente:

      Al comienzo el protagonista se encuentra en la oficina donde trabaja; la imagen viaja a cámara rápida, muy acelerada, indicando que se está en un día de trabajo, en plena actividad diaria. Hay estrés, movimiento, inercia de trabajo, un cierto descontrol. De pronto la dinámica habitual diaria se detiene, y la cámara también se calma, fijándose en Griffin Dunne. Hay más pausa porque se está pasando de un estado de vigilia a otro de reposo, antecesor del sueño...





     La misma oficina representaría la habitación del protagonista, y su sillón podría ser su cama. Antes de acostarse hay que fijarse en la actitud de Paul Hackett: éste echa una mirada a lo que podría haber sido el día que ha trascurrido; los gestos de sus compañeros, las fotos y los bolígrafos en las mesas de la oficina, la monotonía del día a día se vería como un preludio del sueño. De hecho Griffin Dunne, cuando habla con uno de sus compañeros, explicándole cómo tiene que hacer para utilizar un programa informático, se gira con calma y observa la oficina y a los compañeros que ocupan su espacio, esa mirada es como un recuerdo retrospectivo de lo que fue su día, como cualquier otro día, con los mismos mecanismos donde lo usual es la norma y lo sabido; y en la mirada de Paul Hackett se nota que Morfeo comienza a hacer acto de presencia... está a punto de sucumbir al sueño... y el sueño comienza:





    En la fase más superficial todavía hay control de las situaciones, aunque comienzan los primeros síntomas de que se está viviendo otra cosa diferente de lo real; aún así hay suficientes elementos reales como para no sentir desamparo o falta de control. Un poco más tarde, y en esta parada entraría en escena el taxista amante del flamenco con mirada de loco no del todo agresivo, se pasa a una fase del sueño más profundo, y es el taxista el que lo transporta rápidamente. Éste representaría el agujero que lleva a Alicia al país de las maravillas. El taxista se puede interpretar como la transición del sueño amable y sin demasiadas complicaciones a la pesadilla, a lo oscuro, aquí contada más bien en forma de comedia, pero una pesadilla que irá de menos a más... ¿y que nos encontramos por el camino, que sería el desarrollo central de la estructura del film? Pues a personajes solitarios, tristes, atormentados o con grandes inseguridades que sufren y que buscan comprensión, que se les entienda y se les valore, aunque sea un poco, personajes que buscan compañía porque la soledad los aplasta, personajes con una sensibilidad a flor de piel, una sensibilidad con tendencia al histerismo como el que sufre Julie, la mujer camarera que invita a Paul Hackett a su casa porque cree que le gusta.

    Por último nos embarcaríamos en plena vorágine de angustia e impotencia que una pesadilla amenazante representa; pero aquí no demasiado dramática porque, como dije antes, el tono es de comedia y no de terror. La amenaza no se debiera justificar porque no hay ningún delito que castigar, pero eso no importa porque la razón aquí ya no importa, sólo el hecho de ser condenado y perseguido para castigar una culpa que no es tal. Todo estos acontecimientos empapan de impotencia y miedo a un Griffin Dunne desamparado y con ganas de huir, con un irrefrenable deseo de salvarse, y más sabiendo que no es culpable de nada, sólo de no estar en su sitio en el momento menos adecuado, aunque al principio le atrajera esa novedad envuelta en misterio que se podría interpretar como ganas de vivir nuevas experiencias para huir de la monotonía y el tedio, y aceptar la propuesta de Rosanna Arquette sería como una forma de evasión.


   ¿Y qué ocurre cuando todo termina? Que Griffin Dunne se despierta en el mismo lugar donde comenzó su "aventura nocturna": en su oficina, que es su habitación... ¿Y qué le dice el ordenador, que sería su despertador? Le dice: "Buenos días, Paul"...


         9.25 / 10












- No sólo ve películas, se las come
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cicely

Yo la vi en su momento y me gustó,pero años después la volví a ver y ya no me gustó tanto,aunque la verdad es que al tío le pasa de todo y hay momentos en que te da la risa de ver lo mal que lo pasa,aunque al final te da pena y todo.
Es ya todo un clásico del cine de los 80,su estética,su lenguaje,todo lo que a mediados de esa década estaba de moda..al menos sólo por recordar aquella época merece verla.


Un día sin sonrisa,es un día perdido.
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princesadelguisante

Esta peli de Scorsese no llegó a gustarme demasiado, aunque es cierto que las pasa canutas  y a veces piensas, ¿pero que más le va a suceder? No sé, pero no tuve feeling con los personajes. De todas formas, la crítica muy bien, repli, como siempre :guay
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Guevara

Cuando la vi en su día me gustó bastante, pero hace mucho de eso y sólo recuerdo cosas sueltas. Tendría que revisionarla y, no sé, igual ya no es lo mismo.

Ya sabes, Hispano, que me reservo mi comentario para cuando realmente pueda comentar algo, pero... volveré...
Los japoneses no miran... sospechan (Woody Allen)
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Mai

Adelanto que esta peli me encantó. La tengo por casa... cuando la tenga recientita os comento.

Bien, repli :guiñar


"Me despierto muy temprano.Mi vuelta del campo de los sueños es brutal al entrar en el país de lo cotidiano" (Léolo)
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Michael Myers

UNA NOCHE DE (Y CON) LOCOS

Martin Scorsese empezó la década de los 80 con un filme titulado 'Toro salvaje' en el que pensaba que sería su último gran trabajo tras un periodo personal bastante difícil en el que casi muere debido a una hemorragia interna fruto de abuso de sustancias y abuso de medicamentos. Afortunadamente para él y para los que somos grandes admiradores, 'Toro salvaje' fue un gran triunfo (y quizás la que debió ganar en los premios Oscar) y su carrera continuó con 'El rey de la comedia', cinta menor a mi parecer, a la que siguió esta 'Jo, ¡qué noche!' En la que pudiese parecer una comedia de pasar el rato, mas solamente es cierto que es comedia, y no necesariamente divertida.

Griffin Dunne (principalmente conocido por 'Un hombre lobo americano en Londres', entre otras) interpreta a Paul Hackett, un trabajador de una compañía de informática quien una noche aburrido en su casa se va a un bar, entabla conversación con una chica llamada Marcy y cuando haces ¡pop! Ya no hay stop. La conversación con el personaje de Rosanna Arquette (normal que Paul se sintiera atraído) es solamente el punto de partida de una aventura de una noche que Paul jamás olvidará.

Scorsese retrata en lo que parece un simple trabajo cinematográfico de transición, un paisaje moderno de represión, donde el compañero de trabajo de Paul (Bronson Pinchot en una breve aparición) le confiesa a Paul sus planes de abrir una editorial en lugar de quedarse en ese puesto que, según él, no quería estar para siempre. Bajo una capa de gran ciudad y progreso, la Nueva York de 'Jo, ¡qué noche!' Esconde una deprimente reflexión de que esta vida de trabajo-casa-casa-trabajo es una jaula invisible y que la salida ilusionante de salir y conocer gente a veces tampoco es una experiencia fructífera, como vemos en los distintos personajes con los que Hackett se va encontrando como la depresiva Marcy, la nada mojigata Kiki (Linda Fiorentino), el aficionado al sado Horst (Will Patton) o la habladora e inestable Julie (Teri Garr). Todos ellos hacen que Paul pase una noche inolvidable.

Su escena final pone el broche a un ciclo nocturno y pone en evidencia su mensaje poco esperanzador, culminando un visionado que no deja indiferente.

Si bien es verdad que Scorsese es y será recordado por otros muchos largometrajes antes que este, estamos ante el que es un producto un poco infravalorado, pues por debajo de su apariencia de comedia de líos surrealistas se esconde un mensaje poco positivo (aunque realista) de la vida como una jungla urbana en la que a veces hay que coexistir con chiflados y gente de todo tipo. No solo Griffin Dunne destaca, sino que los diversos secundarios que le van acompañando durante la noche también realizan unos buenos trabajos, subrayando a Teri Garr como Julie, una camarera que en apariencia es irresistible, pero que se pasa con una conversación con ella y a Rosanna Arquette como la depresiva primera compañía del protagonista.

No llega al nivel de 'Uno de los nuestros', 'Toro salvaje' o 'El lobo de Wall Street'. No quita que esta sea una película muy recomendable que ayuda a conocer otra faceta del trabajo de Martin Scorsese como autor de comedia negra.

7
Quizá en esos últimos días, el amó la vida con más intensidad que nunca, no sólo su vida, la de cualquiera, mi vida.
Y lo único que quería eran las mismas respuestas que el resto de nosotros: ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? ¿Cuánto tiempo me queda?
(Blade Runner)
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