Un matrimonio en crisis compuesto por Brick y Maggie se traslada a la gran mansión familiar en donde se celebrará el sesenta y cinco cumpleaños del padre del esposo (Burl Ives), un desabrido self-man que a causa de una grave y dolorosa enfermedad se encuentra al borde de la muerte, una muerte que intentará ser aprovechada ambiciosamente por otro de sus hijos, Gooper (Jack Carson), un gris abogado y su cargante mujer Mae (Madeleine Sherwood).

- Basado en la obra teatral homónima de Tennesse Williams, tan cargado de pasiones y tensiones irresueltas, fue también un drama en la carrera de Liz Taylor, quien a mitad de rodaje supo que su marido de entonces, Mike Todd, había fallecido en un accidente de avión. La Taylor luchó denodadamente para superar el shock y se entregó al personaje de Maggie con los cinco sentidos puestos en el trabajo.