Buscador

Twitter Facebook RSS

'Romería' - Con R de Vigo

Vía El Séptimo Arte por 02 de septiembre de 2025
Imagen destacada

Viendo 'Romería' no podía dejar de pensar en que estaba viendo algo bastante parecido a un vídeo doméstico. Lo sea o no en mayor o menor medida, la impresión, obvia y clara, es que se trata de una película con un componente autobiográfico fuerte; de una suerte de dramatización de una experiencia personal... quizá, demasiado dependiente de dicha experiencia personal.

No ayuda la dispersa obviedad de una película que juega a ser sutil para luego, por ejemplo, en su segunda mitad, cual Terrence Malick de mercadillo, insertar una larga secuencia onírica a modo de flashback que subraya lo que hasta entonces se había sugerido con palabras, y con brocha ya de por sí gorda. Por si alguien no se había enterado. Por si no era lo suficientemente sutil/obvio.

Una obvia sutileza (o sutil obviedad) que no encuentra fortuna entre unos personajes reducidos a ser un concepto: esa gran familia española que fiel a la extrema politización actual se tiende a monocromar y categorizar con una o dos palabras. Justo, lo contrario a lo que intentaba la Carla Simón en 'Alcarrás'; recordemos, la fotografía de un recuerdo expuesta con total naturalidad.

Naturalidad de la que carece 'Romería', no en la dirección de actores o en su planteamiento visual, sino en un discurso que, a diferencia del citado filme de 2022, trata de encajar dentro de los muros de una narrativa, presuntamente delimitada por un principio y un final. Una narrativa enfocada a formular las preguntas adecuadas que respalden unas respuestas definidas de antemano.

No es que 'Romería' sea o no sea una película política, pero sí se siente como aquel político que sólo concede entrevistas a determinados medios a sabiendas de que no van a poner en duda su tesis. Una suerte de dramatización militante de una experiencia personal que no se siente libre y natural, sino autoimpuesta por una interpretación unilateral que apenas consiente un resquicio de duda.

Las hay, pero Carla Simón pasa por encima de forma tan inconcreta como lo hacía en su anterior filme. Un filme, no obstante, marcado por un cariño a unos personajes, un entorno y un contexto que se echan de menos en 'Romería', a la postre, una película tan fría, distante, elocuente, expresiva y pija como un vídeo doméstico de un familiar lejano con el que no puedes permitirte tener un roce.

Porque así es la familia, y eso.


Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex

 

'Alcarrás' - Aquellos años maravillosos

 

'Verano 1993' - Hola, chata, ¿como estás?

 

Temas relacionados

< Anterior