Si no hay nada peor para una comedia que verse incapaz de provocar la risa, no hay nada peor para cualquier otro tipo de película que provocarla casi constantemente y sin querer. Ya se sabe, reírse con o reírse de, diferencia sustancial aunque el resultado venga a ser el mismo. Y si en ocasiones uno acude a un pase de prensa y no tiene muy claro cual puede ser la opinión general ni en que bando se está tras acudir al de 'XP3D' no me cabe duda que las irrespetuosas carcajadas al unísono del grueso de los asistentes, entre ellas las de un servidor, dejan bien claro que estamos ante la mejor comedia de la temporada... aunque presuntamente sea una de terror. Dicho de otra manera, se trata de una cinta tan mala que tiene todo el potencial disponible para convertirse en una gran mala película al más puro estilo Uwe Boll.Algo está pasando en el cine español. Los estrenos durante el último mes de tres producciones tan dispares como 'Fuga de cerebros 2', 'Copito de Nieve' y esta 'XP3D' evidencian que por fin hay quien aparte de Santiago Segura ha entendido que toda cinematografía necesita de una industria en la que apoyarse... y además lo ha puesto en práctica. Las tres son producciones 100% comerciales que han sido diseñadas, la palabra clave, para satisfacer las supuestas expectativas más elementales de cada uno de los públicos a los que van dirigidas sin importarles otras posibles consideraciones que no sean puramente industriales, ni mucho menos el qué dirán de ellas. Se agradecen las intenciones, la verdad, pero ya puestos que se hace también se agradecería el resultado si este se hiciera además de bien con un poco más de ambición, algo que sin ir más lejos la propia Rodar y Rodar ha demostrado poder y saber hacer con el 'El orfanato' y 'Los ojos de Julia', filmes que más vale dejar totalmente al margen y con los que el primer (¿y último?) filme de Sergi Vizcaino para su desgracia tiene bien poco que ver. ¿Será el 3D...?

De que 'XP3D' es una mala película no tengo ni la más remota, insignificante o inquietante duda, sin prejuicio alguno, e incluso que lo es aún peor de lo que la propia palabra es capaz de transmitir ya se sea un entendido en el género o no. Cualquier cosa que se diga que pueda contradecirlo, especialmente en honor a la bandera, es una mentira en estado puro. Ahora bien, admito que su consideración como película puede plantear dudas más serias y un debate más abierto, aunque yo desde luego considero que llamar película a un producto como este puede resultar hasta ofensivo para cualquier otra película que se haya ganado ese derecho por méritos propios, especialmente si como es el caso hasta aceptándola como producto deja mucho que desear. Porque 'XP3D' es más una estrategia de marketing que una película, más una excusa para encalomarse a esa mal llamada variante del género de terror que hace del ¡buh! un mandamiento divino; en resumen, es algo a proyectar en una pantalla simplemente porque es proyectable y se puede vender como tal aunque en su estado natural convertiría a su público potencial en algo parecido a un coprófago.

Básicamente la idea es copiar tal cual las señas de identidad más bastas, insustanciales e impersonales de esa línea de slashers baratos e intercambiables que tanto les gusta producir a los estudios norteamericanos por su escasa capacidad para producir quebraderos de cabeza, carne de cañón para los espectadores más despistados y menos ambiciosos, de centro comercial se les llama, cuya medida del éxito es directamente proporcional al escote de la protagonista o a los músculos del protagonista. No hay más, es una americanada rodada en español, pero salvo el acento ningún aporte que justifique una propuesta mal construida y peor desarrollada. No hay historia, sólo una vaga excusa hilvanada a través de una serie de ideas que vistas en pantalla resultan ridículas; no hay personajes ni intérpretes, tan sólo muñecos que marchan al campo vestidos a lo Dolce & Gabbana marcando pecho... menos el "friqui", ya se sabe, el Iker Jiménez que aporte las respuestas precisas; no hay conflicto ni propósito narrativo, tan sólo un ir y venir hasta que en pantalla sólo quede quien tiene que quedar para que ponga FIN; no hay... bueno, es que por no haber no hay ni un acabado técnico digno de mención, ni un 3D que sirva para reconciliarse con un formato condenado a hundirse igual que el Titanic... ni mucho menos sustos, momentos, asesinatos o escenas que rompan el reinado de la mediocridad que se establece ya desde su introducción. Y mejor no hablemos de sus diálogos, probablemente de lo peor que nadie se haya atrevido a decir en público en mucho tiempo...

A estas alturas cualquier cosa que pueda añadir que no haya quedado ya patente sería redundar en una cuestión a la que le dedicaríamos más palabras que las que pueda haber en su guion, si acaso sólo para reafirmar mi orgullo tratando de resultar ingenioso a costa de un cadáver al que como es evidente resulta fácil pisotear con o sin saña. No obstante no puedo terminar este crítica sin subrayar algo que aunque ya ha quedado dicho al principio conviene resaltar cuantas veces haga falta: y es que si bien 'XP3D' es una película mala, mala y mala... lo es en el punto exacto para que su visionado sea toda una delicia especialmente rodeado de amigos, para que como he dicho en el primer párrafo estemos ante la que posiblemente pueda venderse como la mejor comedia de la temporada. Vale que no es su propósito, pero por lo menos lejos de ser una xperiencia dolorosa como lo fue 'Tiburón 3D: La presa' las risas de buena parte de los presentes demuestran que no fui el único que se lo pasó como la teta de la Corberó que, finalmente, no llega a verse en pantalla a pesar de las constantes insinuaciones. Y es que es tanto lo que se puede disfrutar con 'XP3D' que incluso sospecho que es mala aposta, máxime teniendo en cuenta que no hay otra manera de poder xperimentar algo con ella. Si es que incluso para hacerlo mal hay que tener algo de maña...

Nota: 1.5

Por Juan Pairet Iglesias