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'Urchin' - A ellos, a nosotros

Vía El Séptimo Arte por 10 de noviembre de 2025
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La notable ópera prima de Harris Dickinson es un proyecto muy personal para el actor, quien creció rodeado de gente que luchaba contra la adicción, y contra situaciones de las que no podían escapar. A través de su trabajo con diferentes organizaciones benéficas, Harris conoció de cerca la realidad de las personas sin hogar y los desafíos a los que se enfrentan.

Decidido a contar estas historias y a destacar el trabajo de estas organizaciones, Dickinson sitúo 'Urchin' en su propia comunidad, esculpiendo y adaptando su película a lo que sucedía a su alrededor. Pero como las historias sobre adicción, indigencia y trauma a menudo pueden resultar un tanto pesadas, le añadió una vigorizante y compensatoria capa de comedia.

Porque los dramas como el que relata con prestancia 'Urchin' pueden (y deben) ir acompañados de humor y frivolidad. Porque con un toque de humor y algo de frivolidad todo entra mucho mejor. Porque también se trata de optimismo y esperanza; de una historia dramática pero inspiradora y aleccionadora. De la vida de alguien, de muchos; de echar una mano. 

Dickinson, influenciado por figuras el cine británico como Mike Leigh, Ken Loach o Shane Meadows, no quería hacer algo que socavara los problemas mostrados en la película. O que los mostrara desde un punto de vista básico y arquetípico. El cine de la clase trabajadora tiende a ser sombrío a menudo. Pero muestra historias y realidades que necesitan ser contadas.

Con 'Urchin' Dickinson se sitúa en punto intermedio, combinando elementos del cine de alto nivel con un enfoque más profundo e investigado. La idea, obvia, es adentrarse en estos temas y emprender un viaje de la mano de un gran personaje, vulnerable e incómodo como al que da vida y dota de alma Frank Dillane, permitiéndoles reír e incluso enamorarse.

A ellos, a nosotros.

Un arrollador, enérgico, vivido y desarmante drama social; por el sentimiento, humanidad y autenticidad que emana de la pantalla, del relato, de la historia, del personaje. Dickinson ha tardado años en darle forma, en esculpir su alma con sumo cuidado, implicación, cariño, calidez, cercanía y respeto. Algo que se siente y percibe en cada fotograma de esta notable película.


Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex

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